Valentín Ochoa, republicano

Son varios y diversos los actos organizados por entidades políticas y sociales en recuerdo de la proclamación de la IIª República, durante este mes de abril, inciden mayoritariamente, supongo que por el romanticismo propio de los amantes de la Segunda República, en la iconografía del fusil y el puño en alto, la lucha contra el fascismo y las victimas de la dictadura, no suelen hablar, ni los medios de comunicación hacer referencia, de los logros políticos y avances sociales del régimen que nacía hace ahora setenta y cinco años, ni de los hombres y mujeres que propiciaron y anhelaron durante lustros su llegada, condenados a contemplar su desintegración apenas nacida. Por ello, desde Langreo, queremos recordar D. Valentín Ochoa Rodríguez, uno de ellos, y no sólo una calle de La Felguera.

Antón el Chiova, nombre por el que era conocido nuestro estimable poeta, nació el 23 de marzo de 1879 en el barrio Los Nozalones de Sama de Langreo, tras los primeros estudios, trabaja en la fragua familiar y asiste a clases nocturnas en la Escuela de Capataces de Mieres, logrando el título de facultativo de Minas, Hornos y Fábricas en el año 1899, ingresando posteriormente en la empresa Duro y Cía., donde desarrolla toda su vida profesional, que compatibiliza con la de profesor en la Escuela Elemental del Trabajo de La Felguera, hasta su jubilación en el año 1948.

Con el inicio del siglo empieza a dar a conocer sus primeras poesías y a colaborar con artículos de índole política en publicaciones locales, algunas de ellas fundadas por él:

En 1904 funda el periódico El Porvenir de Langreo, “un informativo político y comercial discreto y ponderado sin llegar nunca al ataque personal” en palabras de Cándido F. Riesgo .

En 1910 contribuye a la fundación de El Concejal, periódico republicano, que destaca por su rigor, moderación y prudencia y se propone “elevar en lo posible, moral y materialmente el bienestar de los langreanos” .

En 1918 funda, junto con otros correligionarios de la Fraternidá Republicana de Langreo, El Nalón , semanario republicano.

La proclamación de la II República es recibida con alborozo por Valentín Ochoa, quien deposita muchas esperanzas en el nuevo régimen, la desilusión le llega pronto, pues apenas un año después, el consistorio de Langreo prohíbe los entierros religiosos y el masón Valentín, laico y tolerante con todas las creencias, se da de baja en la Fraternidá Republicana como protesta.

Al desencadenarse la guerra civil, a pesar de haber abandonado la militancia activa, no duda cual es su bando y sigue los dramáticos acontecimientos desde su casa en Sama, y cuando los aires se ponen difíciles para los reformistas de Melquíades, desde el Candanal, acogido en casa del comunista Casto García Roza, refugiándose en la lectura.

Tras finalizar el conflicto, Ochoa se vuelva triste y solitario, son tiempos de miedo, delación e infamia, algunos vecinos dejan de saludarle. No se libra de la represión de los vencedores y en 1944 le procesa el Tribunal Especial para la Represión del Comunismo y la Masonería bajo la acusación de pertenecer a Logia Riego nº 2 de Gijón, al aparecer su nombre en los archivos requisados por la GESTAPO en Paris, se había iniciado en 1930 y su nombre simbólico era “Dante”, juicio del que sale “bien librado”, conmutándosele la pena de quince años por la libertad condicional, gracias a los informes favorables elaborados por la policía y avalados por personas influyentes de Langreo.

En 1948 solicita la jubilación de Duro Felguera, y harto del ambiente de sospecha y mezquindad que se respira por entonces en Langreo, se traslada a vivir a Gijón, donde fallecerá el 8 de diciembre de 1951.

Valentín Ochoa, republicano; Antón el Chiova, poeta; Dante, masón; era un hombre libre y de buenas costumbres que contribuyo al advenimiento de la República, a la que sólo exigía que fuera “honrada y justa”; fueron los otros, los intolerantes, los dogmáticos y los autoritarios los que la mataron.


Langreo, 14 de abril del 75 aniveresario de la proclamación de la Republica