Hilo de seda: La Manipulación Política

Decía el profesor Aranguren en el tan lejano curso 60-61, ya hablaba de “neoliberalismo”, algo tan ingenuo hoy como : “El ciudadano es tan libre, o tan poco libre –según se consideren las cosas-, como el consumidor. Enteramente libre de coacción violenta, pero heterocondicinado –al menos mayoritarimente- por la presión de social ejercida mediante los medios de comunicación de masas a los que, como no tenga una mente extremadamente crítica e independiente, es muy difícil que pueda resistir”.

Las técnicas de manipulación (propaganda, publicidad) son idénticas, se intercambian y se retroalimentan entre el campo mercantil y el político; las ideas se imponen publicitariamente al igual que los candidatos y los programas políticos, como los artículos comerciales.

¿Sorprendidos por como inicio este breve alegato del día de hoy? La verdad es que cada día me resulta mas pesado el incluir algo en el blog. ¿Falta de inspiración? No puedo dar ese argumento, los despropósitos de los “políticos” locales y comárcales son tantos que me faltaría tiempo y espacio para hacerlo, pero la idea de “Fraternidá Republicana de Langreo”, era criticar, analizar y comentar los “propósitos”, y ese es el problema, ¡No los hay, no existen! Y sentado añorando el aroma de un habano, la alergia me impide hoy disfrutar de uno, me llega desde un televisor excesivamente alto las últimas informaciones sobre la trama urbanística de Marbella, curiosamente se trata de un programa de los que se denominan “rosa”, no se la razón de tal denominación, dejémoslo; lo cierto es que donde más se habla de este asunto es en este tipo de programas, en el resto de medios se toca de pasada y con total asepsia, es como si se tratara de insensibilizarnos, de vacunarnos, ante este problema de dimensiones alarmantes pues afecta a la forma de hacer urbanismo en la mayor parte de nuestros municipios, grandes medianos y pequeños, costeros y de interior, con gobiernos de uno u otro signo, la especulación del suelo, las informaciones privilegiadas, las recalificaciones interesadas, son moneda común, pero al ser tratados en este tipo de programas de los que el subconsciente ya te protege mediante la generación de los filtros oportunos, es precisamente ese filtrado selectivo el que impide que podamos conocer, procesar y asimilar toda la información seria y veraz sobre las tramas de la especulación urbanística; es una teoría pero siendo la segunda preocupación de los españoles el problema de la vivienda, no se entiende de otra manera la falta de una reacción ante tal estado de cosas.

Para hacer posible el acceso de todos los ciudadanos al bien común material, a la democracia real y a la libertad el “viejo” Estado de Derecho tendrá que constituirse, sin dejar de serlo, en Estado de Justicia, organizando no sólo la producción sino la democracia y la libertad, limitando los gastos antisociales, la información (propaganda) dirigida y chocarrera, la dilapidación individual, y favorecer las actividades y servicios sociales, la salud pública, la instrucción, la educación para el ocio, en definitiva el “bien común”, que debe de prevalecer por encima de los beneficios de las grandes corporaciones mercantiles y también por encima del propio Estado.

La Universidad, la radio, la televisión, etc., tienen que ser convertidas, no Politica, sino administrativamente en “Servicio Público”, para que a ellas tengan acceso todos los ciudadanos y todos los grupos, en lugar de ser un monopolio de algunos de ellos. Resulta innegable que esto supone una limitación de la libertad pero se trata de limitarla para preservarla, generalizar la libertad, extenderla a todos implica reducirla a su núcleo esencial, hacerla compatible con la de los demás, recortando la de todos en lo que tenga de arbitrario y caprichoso.

Para general información de los que se acercan a este blog postulando una republica “ni de derechas ni de izquierdas”, nuestro mayor agradecimiento y respeto, pero preferimos una republica bajo los principios de la izquierda liberal.

En Langreo, durante el 75º aniversario de la IIª Republica